Estimación del riesgo de un segundo ataque al corazón o una dolencia leve.
Las personas que ya han sufrido un infarto de miocardio corren mayor riesgo de sufrir otro o una enfermedad relacionada. Sin embargo, este riesgo varía dependiendo de diversos factores.
Este riesgo varía en función de una serie de factores (consulte el apartado «Factores de riesgo para un segundo infarto de miocardio»). Esto significa que la probabilidad de un segundo infarto de miocardio en los próximos diez años puede oscilar entre el 10 % o «1 de cada 10» y más del 50 % o «1 de cada 2».
Para entenderlo, imagínese dos grupos de 100 personas que han tenido un infarto de miocardio. En un grupo, diez de ellos tendrán eventualmente un segundo infarto de miocardio a lo largo de un período de diez años. Sin embargo, en el segundo grupo, 50 de ellos tienen un segundo infarto de miocardio. Saber a qué grupo pertenecería, le sería útil a la hora de hablar con su médico en caso de que fuera necesario un tratamiento más intensivo.
La puntuación de riesgo SMART combina estos factores de riesgo importantes para producir un único valor de riesgo de sufrir un segundo infarto de miocardio o una dolencia relacionada a lo largo de un período de diez años. Está diseñado para cualquier persona que haya sufrido un infarto de miocardio previo (o que haya tenido problemas relacionados como angina, accidente cerebrovascular, un ataque isquémico transitorio, aneurisma, problemas con los vasos sanguíneos en las piernas o cualquier combinación de estos). Es una escala fácil de usar y que permite un sencillo cálculo de los factores. Para obtener un resultado preciso es esencial que rellene todos los campos y es posible que necesite pedirle a su médico algunos datos adicionales. Pero si no tiene toda la información a mano, puede utilizar la puntuación de «media» como guía hasta que la tenga. Esto puede ser el caso de los análisis de sangre, los resultados de colesterol de proteína C reactiva de alta sensibilidad (hsCRP) o lipoproteína de alta densidad (HDL). Siempre es importante discutir las mejores opciones de tratamiento con su médico.