Consulte con su cardiólogo sobre cuándo puede volver a conducir
Después de haber sufrido un infarto de miocardio y según el tipo de intervención a la que se haya sometido, la conducción puede reanudarse en una semana o un mes.
Conducir puede ser estresante y podría suponer un factor de riesgo adicional para las enfermedades cardíacas. Su cardiólogo decidirá cuándo puede volver a conducir en base a varios aspectos. Estos incluyen la duración entre la aparición del dolor torácico y la intervención, la ubicación del infarto de miocardio, la capacidad de bombeo del corazón, el tipo de procedimiento utilizado para restaurar el flujo sanguíneo a los vasos estenosados y el grado de restauración, si hay otras arterias coronarias estenosadas que necesitan ser abiertas o tienen estenosis inaccesible, la estabilidad del ritmo cardíaco, la duración de la hospitalización, las complicaciones en el hospital y la participación en programas de rehabilitación cardíaca.
Las recomendaciones para volver a conducir varían y pueden estar sujetas a una regulación específica de cada país. En general debería esperar:
- Al menos cuatro semanas si se sometió a una cirugía de revascularización quirúrgica (tres meses para los conductores profesionales, con ergometría previa).
- Al menos una semana si tuvo un infarto de miocardio sin complicaciones y la capacidad de bombeo de su corazón, llamada fracción de eyección ventricular izquierda (FEVI), se sitúa por encima del 35 %.
- Un mes si tuvo un infarto de miocardio con complicaciones como insuficiencia cardíaca, con FEVI por debajo del 35 % o un trastorno del ritmo cardíaco (arritmia).
- Seis semanas para los conductores profesionales que sufrieron un infarto de miocardio y la FEVI es superior al 35 %. La conducción está contraindicada si la FEVI es inferior al 35 %.
- Tras 24 horas de una angioplastia coronaria transluminal percutánea programada si el procedimiento no tuvo complicaciones y no se observan arritmias (un mes para los conductores profesionales).
