La familia es esencial como apoyo y motivación en el proceso de recuperación de una cardiopatía.
Los episodios cardiovasculares pueden resultar devastadores a nivel familiar. Implicar a la pareja y a su familia más cercana o núcleo familiar en el programa de rehabilitación cardíaca es una oportunidad única para unir fuerzas en el proceso de recuperación y tomar decisiones conjuntas sobre los cambios que deben realizarse en la salud.
Su pareja y su núcleo familiar pueden suponer un gran apoyo, estímulo y motivación para recuperarse de una enfermedad cardíaca. Muchas parejas han dicho que el problema cardíaco les unió más.
Los episodios cardiovasculares pueden ser devastadores para las familias, dado que, a menudo, la enfermedad, la hospitalización y el tratamiento les hace sentir impotencia y angustia. Las parejas pueden estar preocupadas por los siguientes pasos que hay que dar para que su ser querido recupere la salud. Pueden surgir sentimientos negativos, incluyendo culpa (si hubiese hecho esto o lo otro…), cambios de humor y preocupación sobre las consecuencias financieras. Esto puede afectar la calidad de la relación y la recuperación del paciente. Por lo tanto, es crucial que cada miembro de la familia se siga cuidando bien. Eso significa dormir lo suficiente, sentirse relajado, llevar un estilo de vida saludable y hacer sus cosas favoritas.
Las parejas a menudo se sienten responsables de la salud del paciente e ignoran sus propias necesidades. Pueden llegar a asumir más tareas domésticas, querer estar disponibles constantemente y limitar las actividades del paciente por temor a efectos negativos sobre el corazón. Los pacientes pueden experimentar esto como una sobreprotección y un control, por lo que ocultan sus sentimientos y pensamientos para que la pareja no se preocupe. Puede surgir irritación mutua, lo que no es beneficioso para la relación o el proceso de recuperación. Saber adaptarse a vivir con un enfermedad cardíaca significa ser abierto, honesto y respetar el espacio de cada uno.
Implicar a la pareja y a su familia más cercana o núcleo familiar en el programa de rehabilitación cardíaca es una oportunidad única para unir fuerzas en el proceso de recuperación y tomar decisiones conjuntas sobre los cambios que deben realizarse en la salud. Después de todo, informarse juntos sobre los aspectos médicos del problema cardíaco, recibir información sobre una alimentaciónsaludable, y ver el progreso del paciente a lo largo de las sesiones de formación estimula a cada miembro de la familia a asumir la responsabilidad de su propio papel. Algunos programas de rehabilitación ofrecen una sesión de pareja, en la que se abordan temas como la comunicación, las implicaciones del problema cardíaco en pareja, y se tratan problemas sexuales.
